El término “Educación Literaria” está íntimamente relacionado con la
competencia literaria, que es definida por Aguiar e Silva como un saber que
permite producir y comprender textos.
Según este autor, se trata de un modelo elaborado a partir de la
gramática del texto y no mediante una gramática literaria de la frase. Así
pues, nos proporciona una visión en la que la unión de lectura y escritura son
las claves para la adquisición de la competencia literaria. Por ello, entran en
juego la adquisición de hábitos de lectura, así como la capacidad de disfrute,
además, de diversos aspectos de tipo estético, cognoscitivo, lingüístico y
cultural, sin olvidar que la literatura influye grandemente en la educación en
valores[i].
Mientras me iba adentrando en la asignatura de
educación literaria y desarrollando los distintos trabajos, el concepto de lo
que tendría que ser la asignatura se iba transformando en multitud de recursos
para llevarla a cabo.
Desde que comencé a trabajar en temas de
educación, las competencias, los estándares de aprendizaje, la motivación; el
descubrir que existían inteligencias múltiples o que cada niño aprende de una
forma; iban cobrando vida en mi manera de impartir una asignatura.
Al
adentrarme en esta materia e intentar seguirla tal como se me pedía, la
metodología que ya estaba presente en mí, se iba llenado de recursos y nuevos
planteamientos. Dándome cuenta de que de nada sirve saber que algo es
bueno si no sabes el cómo llegar a ello.
Con
esta materia he trabajado las dos perspectivas:
- Primero he descubierto la importancia de un tipo de metodología en el que el protagonista es el alumno y la manera que consigues que descubra un nuevo conocimiento.
- Además de ello, el ir haciendo actividades por tema explicado, me ha ido aportando el cómo, y qué recursos utilizar para una buena puesta en práctica.
Desde
esta visión, desarrollaré mi análisis final de la siguiente manera:
- Explicaré que me ha aportado cada unidad tanto en conocimiento como a la hora de la realización de las actividades.
- Comentaré, a partir de lo trabajado, la importancia de una metodología para un buen aprendizaje de la literatura.
- Concluiré con las aportaciones que me han proporcionado esta asignatura para mi formación como profesora en la materia de literatura.
1. DESCUBRIENDO CADA UNIDAD
TEMA
1. LITERATURA INFANTIL. ANÁLISIS Y SELECCIÓN
¿Qué te hace desear leer un libro? ¿Cómo puedes
saber si gustará, o si cumple los criterios necesarios para que un niño se
entusiasme con él?
Esta unidad me ha ayudado a entender que es tan
importante que un libro sea interesante, como las características que debe de
tener la persona para que la lectura le llegue. Además de ello, me ha
proporcionado las preguntas necesarias que debo hacerme a la hora de
seleccionar una obra literaria u otra.
El amar la lectura, el disfrutar leyendo, e
incluso, el tener un gran repertorio de lecturas a lo largo de la historia. No
es suficiente a la hora de trabajar la Educación Literaria.
El rigor, el conocer las distintas edades y qué
llama la atención en las mismas. El estudiar las características evolutivas de
la infancia y que tipos de ilustraciones les llama la atención, el formularse
las preguntas adecuadas… eran planteamientos que no me había hecho hasta ahora. Me conformaba con disfrutar de la lectura.
Este tema me ha abierto el campo a un
planteamiento serio sobre la importancia que cobra un libro cuando debes
recomendarlo al aula, dándome cuenta de que no es suficiente el gusto por él.
TEMA 2. TEXTOS FOLCLÓRICOS. SELECCIÓN Y ADAPTACIÓN
De todas las actividades es una de las que más me
ha gustado trabajar y una de las que más he aprendido. Puede que sea porque ha sido una de las que más me ha costado.
Cuando nos adentramos en el folclore, nos damos
cuenta que abrimos la puerta a la literatura, a descubrir que la base del
aprendizaje es el querer gustar de las cosas para luego saber de ellas. Es
decir que no se trata de enseñarles todo, sino que en momentos les tenemos que
contagiar la pasión del conocimiento.
Además de ello, el folclore contiene una variedad
de estilos y relatos que da gran facilidad a la hora de trabajarlo, pues a
mayor variedad, la elección del alumno será más amplia y por lo tanto
captaremos su interés con mayor facilidad.
TEMA 3. LITERATURA ESPAÑOLA Y CREACIÓN LITERARIA
Lo
primero que he descubierto sobre este tema, ha sido mi desconocimiento a nivel
legislativo, ya que no recordaba que literatura se estudiaba en secundaria.
Con
respecto al contenido y a las actividades, he disfrutado mucho, pues la
literatura es un tema que me apasiona.
A
medida que me iba adentrando en la actividad muchas preguntas me venían a la
mente: ¿Cómo me hubiera gustado a mí que me enseñasen esta materia? ¿Que hizo
mi profesor para que yo acabase disfrutando tanto de los distintos autores y
optase por las letras en vez de por las ciencias? Y por supuesto: ¿Qué hacer
para transmitir la pasión y el disfrute por la literatura a nuestros alumnos?
El
aprendizaje va más allá del espacio del aula y de la figura del profesor, es
sobre lo que iba reflexionando a medida que iba avanzando en la tarea.
Mostrar
a los alumnos que la literatura va más allá de un libro de texto, era el reto
que quería expresar al desarrollar con mis compañeras e individualmente está
actividad.
El
aprendizaje es una riqueza, no se ciñe a un libro de texto, ni siquiera a una
materia, es una expresión y una lectura, es querer expresar algo y querer
escucharlo, es compartir, es vivir…
Una
semana cultural, abre las puertas del conocimiento y lo vuelve a una dimensión
real e implica a las familias en el mismo.
Ya
no se trata de: los padres llevan a los niños al colegio, cada profesor enseña
su materia y los niños la estudian para aprobar los exámenes.
La
literatura se ha convertido en una aventura en la que todos familias,
profesores, alumnos… podemos aprender, enseñar, descubrir y sobre todo disfrutar.
TEMA 4. LECTURA LITERARIA Y ANIMACIÓN LECTORA
No
es lo mismo que te guste leer que trasmitir el gusto por la lectura, y aunque
ese gusto ayuda, se necesita una buena metodología preparación, y análisis
previo para que se lleve a cabo.
Al
igual que con el tema primero la realización de esta actividad me ha ayudado a aprender
a plantear la elección de un libro y desarrollo de actividades previas, durante
y posteriores siguiendo una serie de criterios, a la vez que un amplio banco de
recursos para que facilite la búsqueda de tareas sobre la misma.
De
trasfondo, al igual que con el resto de actividades, el tratar de inculcar la
pasión por la lectura, tarea que no se reduce a un rato en el aula, sino que
debe de pasar la línea de la lectura obligatoria por trimestre.
Por
ello, la animación lectora ha de traspasar las puertas de la clase e incluir
actividades que se puedan compartir en familia.
TEMA 5. CREACIÓN LITERARIA
¿Y
si lo que imaginamos lo pudiésemos traducir en palabras?
Es
el planteamiento que se iba abriendo paso en mí a medida que avanzaba con este
tema, el expresar de una forma adecuada y que eso llegue a los que nos rodean,
es una de las actividades más complejas del la lengua. Si a eso le sumas que la
imaginación es una de las formas de pensamiento humano más abstracta que hay,
eso nos lleva a darnos cuenta de la dificultad, a la vez que la belleza de lo
que es la creación literaria.
Además
de ser consciente de estas características, el trabajo de este bloque me ha
proporcionado algunas herramientas para poder ayudar a desarrollar y
plastificar en los niños, la importancia de la capacidad creativa, mostrándome
un amplio banco de recursos para realizar todo tipo de actividades creativas
sobre la creación de textos.
2. EDUCACIÓN LITERARIA, UN CAMBIO METODOLÓGICO
Toda enseñanza pretende
crear un proceso de aprendizaje en un contexto dado (recursos disponibles,
características de los estudiantes, etc.) y en un momento determinado en
función de los objetivos fijados tanto al nivel de una asignatura concreta como del proyecto formativo global.
Construir una visión del
aprendizaje supone tener una visión sistemática de todo el proceso en la que
todos los elementos sean coherentes.
Dicho en otros términos, si
los profesores tenemos razón de ser, ésta la tenemos que encontrar en facilitar
el aprendizaje a nuestros estudiantes. Pero no cualquier tipo de aprendizaje,
sino aquél que sirve para construir un cuerpo de conocimientos, habilidades o destrezas
y actitudes flexibles, que le permitan seguir aprendiendo
autónomamente a lo largo de toda su vida.
Además de ello, el
conocimiento no es lo único que un maestro ha de ofrecer en el campo de la
Educación Literaria. La pasión por los libros, el deseo de expresar con
palabras, la riqueza que ofrece toda la historia de la literatura y el disfrute
por la lectura. Son algo más que una serie de metodologías puestas en práctica
en unas horas semanales.
Lo que nos ofrecen las
nuevas metodologías educativas, es sobrepasar el ámbito del aula, dejar de
impartir contenidos y aprovechar la capacidad creativa del niño para que el aprendizaje sea algo real en su vida.
Es la pasión, la imaginación, la curiosidad... la que nos hace querer coger un libro, buscar información o desear plasmar una obra. Por ello es fundamental que las nuevas metodologías plasmen esta nueva forma de plantear la educación.
Frente a la clase magisterial en la que el docente es el centro de todo conocimiento; nos hemos adentrado en nuevas técnicas de aprendizaje en las que el maestro pasa a ser un mediador entre el conocimiento y el niño. Sabiendo además, que no es el único; que hay en el proceso de enseñanza y aprendizaje que es la vida.
A medida que íba avanzando en las distintas actividades, el trabajo por proyectos, el aprendizaje cooperativo, el aprendizaje basado en resolución de problemas, las representaciones, el compartir con la familia las distintas lecturas, el pedir colaboración de otros profesores... se iban haciendo visibles y descubriéndome que ante el aprendizaje siempre hay nuevos recursos que descubrir.
La riqueza que nos ofrece la Educación Literaria, la variedad que existe de formas de aprender, y por supuesto ver a cada alumno como individuo con sus gustos e interesas, nos obliga el buscar variedad de formas para que esta llegue a cada alumno. Además de eso, no podemos dejar de lado que transmitir la pasión por los libros, no es algo que se pueda explicar desde una clase magisterial. Para ello, no solo las nuevas metodologías en educación son fundamentales; sino también el amar tu profesión y disfrutar con un buen libro.
Es por eso que no nos podemos quedar con lo establecido, sino que tenemos que cada día, ir renovando la forma de mediar entre el conocimiento y los alumnos para que les llegue a entusiasmar tanto como a nosotros.
3. CONCLUSIÓN
La lectura siempre ha sido una de mis pasiones y la creación de relatos, una de mis aficiones; con ambas, mejor o peor realizadas siempre he disfrutado. A pesar de ello, en esta materia me he dado cuenta que transmitir el entusiasmo por algo no siempre resulta fácil.
La Educación Literaria, a pesar de ser una de las materias con las que más he disfrutado, me ha hecho comprender, a medida que iba desarrollando las actividades y con las correcciones puestas en las entradas; que trabajar en el ámbito de la Educación Literaria requiere esfuerzo, tiempo y una visión completamente renovada de lo que es la educación.
Me he dado cuenta de que por mucho que me guste leer, sino encuentro las palabras adecuadas, ni el formato correcto, no habrá forma de que mi mensaje llegue al niño.
Por ello, trato de dejar atrás las clases magisteriales en que la memorización lo es todo y darme cuenta que en literatura el potenciar el entusiasmo lo es todo.
Comprender lo que queremos transmitir y el descubrir cómo hacerlo, son dos cosas completamente distintas, pero una no puede ir sin la otra.
Para llegar a descubrirlo hay que ser profesionales, conocer las distintas edades del niño, su proceso de crecimiento y de comprensión, sus gustos e intereses y ofrecerles aquello con lo que sabemos que se van a entusiasmar, o por lo menos intentarlo.
Esa es la única forma de transmitir aquello a lo que estamos dedicando la vida.
La Educación Literaria, a pesar de ser una de las materias con las que más he disfrutado, me ha hecho comprender, a medida que iba desarrollando las actividades y con las correcciones puestas en las entradas; que trabajar en el ámbito de la Educación Literaria requiere esfuerzo, tiempo y una visión completamente renovada de lo que es la educación.
Me he dado cuenta de que por mucho que me guste leer, sino encuentro las palabras adecuadas, ni el formato correcto, no habrá forma de que mi mensaje llegue al niño.
Por ello, trato de dejar atrás las clases magisteriales en que la memorización lo es todo y darme cuenta que en literatura el potenciar el entusiasmo lo es todo.
Comprender lo que queremos transmitir y el descubrir cómo hacerlo, son dos cosas completamente distintas, pero una no puede ir sin la otra.
Para llegar a descubrirlo hay que ser profesionales, conocer las distintas edades del niño, su proceso de crecimiento y de comprensión, sus gustos e intereses y ofrecerles aquello con lo que sabemos que se van a entusiasmar, o por lo menos intentarlo.
Esa es la única forma de transmitir aquello a lo que estamos dedicando la vida.
Estupendo artículo, Lourdes. Felicidades por todo lo que has aprendido leyendo, pensando, haciendo, ayudando a tus compañeros y autocorrigiéndote.
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